
La piel es el órgano más grande que tenemos y que cubre todo nuestro cuerpo. Además es una gran barrera protectora de factores externos, de ahí la importancia de cuidarla y protegerla tal y como se merece.
La piel requiere de un cuidado y protección constante y diario, atendiendo a las necesidades de la misma en función de cada etapa estacional o estado personal en el que nos encontramos, aunque es en la época de verano cuando debemos prestar mayor atención debido a la gran exposición solar a la que nos sometemos.
Antes de hablar sobre las precauciones que debemos tener en cuenta, destacar que no todo es negativo si llevamos a cabo una exposición solar controlada, puesto que los rayos UVA activan los beneficios de la Vitamina D, mejoran el estado de ánimo de las personas reduciendo procesos depresivos y ayuda en el tratamiento de enfermedades cutáneas.
Por el contrario, si no nos protegemos y atendemos ciertos consejos, los efectos negativos que pueden ocasionar en nuestra salud pueden ser muy serios: envejecimiento prematuro, manchas o enfermedades de piel.
La radiación solar está presente durante todo el año, a pesar de que no haga calor o las nubes inunden el cielo, los rayos UVA y UVB se mantienen activos y es por ello por lo que debemos utilizar siempre un protector solar especifico tanto para el cuerpo como para el rostro.
Tenemos que tener en cuenta que hay zonas que están siempre expuestas, tales como la cara, la naríz, las orejas, las manos, los pies, el empeine, etc…unas son más sensibles que otras y es por ello por lo que debemos tener especial cuidado.

¿Cuales son los aspectos que debemos de tener en cuenta para proteger nuestra piel de los efectos nocivos del sol?
Evitar la exposición solar en las horas del día de mayor riesgo (de 12h a 16h)
Aplicar un protector solar media hora antes de la exposición solar y reaplicarlo cada 2 horas. Dicho producto debe proteger tanto de los rayos UVA como de los UVB ademas de ser adecuado a cada tipo de piel. Es recomendable utilizar protectores con SPF 30 o SPF 50.
Los filtros solares es importante que incluyan agentes antioxidantes y Vitaminas A,C,E para que actúen en contra de los radicales libres y el envejecimiento cutáneo.
Una buena hidratación en la piel es fundamental para mantener los niveles de agua adecuados. Por ello, ademas de beber la cantidad de agua recomendable ( entre 1,5l y 2 l diarios), después de la exposición solar no debemos olvidar aplicar buenos cosméticos para hidratar y aportar vitaminas y minerales indispensables para el cuidado de la piel.
El daño que producen los rayos solares en la piel se va acumulando y es irreversible, de ahí la importancia de cuidarla y protegerla durante todo el año.
Recuerda: Una piel cuidada es una piel bonita y sana, asi que no olvides mantener una correcta rutina de belleza y disfrutar de rituales para el cuidado de tu piel en centros profesionales.